Que bien le haría a México, aunque utópico, censurar el Futbol por mandato presidencial y que no hubiera televisión abierta o mejor aún, que no hubiera televisores. Es lamentable vivir en una sociedad indiferente a hechos graves, como los casi 5,000 muertos en lo que va de este año debido a la violencia o los impuestos irracionales que debemos pagar en un país desempleado, pero ¿que importa eso?, lo importante es, que llegue la hora del inicio del mundial de futbol, para seguir albergando la esperanza vendida o metida a la fuerza por las dos grandes televisoras mas poderosas del país, de que ahora si, ¡este mundial será el bueno para la selección!, entonces entonaremos con aires casi patrióticos la ya célebre y mediocre frase del "sí se puede". No importará seguir sin empleo o vivir en estado fallido y que de pronto, algún familiar o un hijo mueran abatidos en el cotidiano fuego cruzado entre "analfabetas asesinos" re-denominados nuevamente "sicarios". Al fin y al cabo, escucharemos corridos en honor a los caidos, seguiremos ansiando en nuestros sueños la camioneta del año con vidrios polarizados para parecernos, por encimita a aquellos ignorantes verdaderos, y festejaremos igual con el "ya merito" la inminente derrota tricolor con un cartón de cervezas, haciendo la vaquita para ajustar el siguiente.
Deberían de llenar el estadio azteca con esos casi 5,000 cadáveres para que sean testigos y espectadores de la mediocridad en la que está hundido el México de hoy.